Las fórmulas de los países de la Alianza del Pacífico para combatir el desempleo juvenil en pandemia
Mientras Colombia ha apostado por los incentivos tributarios para los empleadores, Perú ha preferido los subsidios a las empresas que incorporen jóvenes, y México ha seguido impulsando la capacitación.
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La pandemia del coronavirus ha tenido lamentables consecuencias para el mercado laboral, sobre todos para los trabajadores más jóvenes, y los países de la Alianza del Pacífico -Chile, Perú, Colombia y México- no son la excepción.
En un inédito formato virtual, las autoridades laborales de los cuatro países que componen el grupo se reunieron hoy en el V Encuentro de Jóvenes de la Alianza del Pacífico, este año bajo el lema "Jóvenes, empleabilidad y el impacto de la pandemia".
El evento que se extenderá hasta mañana contó con la inauguración por parte del Presidente Sebastián Piñera -en su calidad detimonel pro tempore del tratado-, en la cual lamentó que "los jóvenes se han visto especialmente afectados por la pandemia del coronavirus y por esta recesión de la economía mundial", pero destacó el trabajo conjunto de los cuatro países en pos de reactivar la economía.
Simplificar sistemas de acreditación de competencias laborales en sectores como el turismo ha sido una prioridad este año, destacó el mandatario, quien agregó que esta iniciativa "va a permitir mayor movilidad de los talentos entre países".
Luego fue el turno de la ministra del Trabajo, María José Zaldívar, quien recordó que la preocupación por el empleo juvenil siempre ha estado, pero que producto de la pandemia "se ha agravado".
"Como Estado más que nunca debemos promover la inserción laboral de los jóvenes y el diseño de programas de formación profesional, que faciliten la recalificación o la reconversión laboral de aquellos que han perdido sus empleos", dijo la autoridad nacional, destacando el trabajo realizado en conjunto por los cuatro países en materia de certificación y de nuevos proyectos para intercambiar experiencias.
Experiencias compartidas
Representantes de cada uno de los países integraron más tarde un panel en el que se abordó la problemática, y la situación nacional fue expuesta por el subsecretario del Trabajo, Fernando Arab, quien lamentó que de los 1,8 empleos perdidos durante la crisis, más de 270 mil corresponden a jóvenes, quienes se desempeñan en sectores particularmente golpeados.
La autoridad planteó que en los últimos tres meses la situación ha repuntado, y destacó que durante los años de trabajo conjunto en la Alianza del Pacífico, desde 2018 Chile cuenta con una jornada especial para estudiantes trabajadores, "que les permite compatibilizar de mejor manera trabajo y estudios", e incorporarse al mundo del trabajo, señaló Arab.
El presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Juan Sutil, también participó de la instancia, reforzando que "muchos de estos puestos de trabajo no van a reaparecer en el mismo rubro", y que con la pandemia "se aceleran los cambios que ya venían ocurriendo, especialmente el comercio electrónico, la transformación digital, y otros desplegarán también oportunidades como pérdidas de empleo".
Para el caso particular de Chile, afirmó que es necesario adecuar el Código del Trabajo, para que este "vaya permitiendo la adaptabilidad y la libertad que es esencial para esta economía post virus".
Desde México, el subsecretario del Trabajo, Barut Bolaño, indicó que del millón de trabajos perdidos en el país, cuatro de cada diez eran ocupados por jóvenes, en su mayoría mujeres.
Por lo mismo, comentó que si bien el gobierno de México ya contaba con una política de juventud "robusta", decidió intensificarla para enfrentar la pandemia. Por lo mismo, han optado por las capacitaciones laborales en alianzas entre el sector público y privado, y dijo que a la fecha hay cerca de un millón y medio de jóvenes que han tenido una capacitación en el trabajo, a la par que el gobierno les brinda una beca por un año que se va pagando mes por mes, así como acceso a los servicios de salud del estado.
"De marzo a agosto incorporaron 253 mil nuevos aprendices, lo que permitió que tuvieran un seguro médico y un ingreso equivalente al menos al ingreso mínimo de los trabajadores", dijo la autoridad.
En el caso de Perú, el ministro del Trabajo, Javier Palacios, indicó que el foco ha estado en ofrecer una alternativa que vincula a las empresas de sectores más afectados, con aquellos sectores del mercado de trabajo -fundamentalmente jóvenes y mujeres- que han sido los más golpeados, y a partir de eso se ha planteado una política pública para promover la contratación de jóvenes.
Adicionalmente, y al igual que México, están planteado iniciativas de capacitación, "usando tecnología que permita involucrar al sector privado y público con plataformas orientadas a identificar competencias demandadas por el mercado y que puedan ser objeto de certificación virtual, para efectos de incorporar a jóvenes y a la población en general".
Colombia, por último, ha apostado por la inclusión de jóvenes e incentivos tributarios. El ministro del Trabajo, Ángel Custodio, señaló que el primer paso fue reconocer a nivel público la posibilidad de incluir jóvenes en las nóminas estatales de carácter obligatorio cuando se amplíen las plantas.
Adicionalmente, se aprobaron normas que implican que los empleadores que contratan jóvenes tienen un incentivo tributario, un beneficio en su impuesto a la renta, y sumado a ellos.
Compromiso del sector privado
En el evento también se dieron a conocer los resultados del Acuerdo de Empleabilidad Juvenil de la Alianza del Pacífico, el cual implicó que más de 70 empresas crearan 100 mil "oportunidades de desarrollo" para los jóvenes de los cuatro países entre 2017 y 2020, incluídas pasantías, prácticas y oportunidades laborales.
"Este Quinto Encuentro es una ocasión única para apoyar y complementar los esfuerzos de los gobiernos de los países que conforman la Alianza del Pacífico para brindar a todos los jóvenes una oportunidad de iniciar su vida profesional, integrarse a la comunidad y mejorar su futuro" dijo Laurent Freixe, CEO de Nestlé para las Américas, empresa que lideró el acuerdo y que cada año organiza el Encuentro de Jóvenes.